En el interior de DIE ENTFÜHRUNG AUS DEM SERAIL , ese adorable singspiel pleno de optimismo, exuberancia y atrevimiento que Mozart compusiera en 1782, brilla con luz propia un aria de su protagonista femenina, Konstanze.
Auténtica “aria di bravura” tanto por su exigencia vocal como por su dramatismo agónico. Su vocalidad está reservada para sopranos líricas con dominio y belleza en la coloratura, unida a un empuje y un dramatismo de enjundia, pero manteniéndose siempre en el elegante terreno del cantabile mozartiano; además de una amplia tesitura, pues estratégicamente se disponen excursiones por los graves que perfilan la expresividad de la pieza, y donde la voz no puede desaparecer.
Todo un reto para el lucimiento, y una golosa trampa.
Escuchemos tres ejemplos muy ilustrativos y en extremos contrapuestos:
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Auténtica “aria di bravura” tanto por su exigencia vocal como por su dramatismo agónico. Su vocalidad está reservada para sopranos líricas con dominio y belleza en la coloratura, unida a un empuje y un dramatismo de enjundia, pero manteniéndose siempre en el elegante terreno del cantabile mozartiano; además de una amplia tesitura, pues estratégicamente se disponen excursiones por los graves que perfilan la expresividad de la pieza, y donde la voz no puede desaparecer.
Todo un reto para el lucimiento, y una golosa trampa.
Escuchemos tres ejemplos muy ilustrativos y en extremos contrapuestos:
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Edda Moser, una dramática de coloratura
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El intenso dramatismo de Diana Damrau
5 comentarios:
Martirios de toda clase va a ser tener que esperar la Konstanze de la Damrau hasta abril del 2010...
Mozart no tuvo ningún tipo de contemplaciones para con la soprano a la hora de meter el Martern aller Arten, Konstanze viene de cantar una muy lírica aria de más de cinco minutos de duración, con un diálogo breve brevísimo como intermedio. Entre las dos arias se tira un cuarto de hora cantando y no cualquier cosa.
El aria es difícil no sólo por la resolución de agilidades sino por los problemas que plantea en los extremos de la tesitura. En este sentido Moser es la más completa.
Me encanta como fluye la música de Mozart en manos de Fricsay.
La Moser está sensacional, pero será por que la de ahora es la Damrau y está prevista en el Liceu en este rol, que estoy como MEI.
Una ária imposible, o por arriba o por abajo. Maltratada por las ligeras, como la Reina de la Noche.
¡¡¡¡Ay, San Mozart, tú si que reanimas a los muertos¡¡¡¡
Hola Sr. Barbebleue.
Me llamo María y soy una principiante en este apasionante mundo de la ópera.
Buscando en la red información precisamente sobre el aria que usted comenta en este post,me he "tropezado" con su blog.
No sé cual sería el término en lenguaje musical para definir lo...¡pero es fantástico!
Entre otras muchas cosas buenas,los post que he leído me maravillan por esa plasticidad tan ¿fluida? a la hora de expresar sus impresiones y para las que yo no encuentro las palabras.
¡Y con qué facilidad lo hace usted!
¡Me lleva en volandas!
Su blog ha sido como encontrar "algo" que colma mis anhelos sobre un tema que me gusta y sobre el que quiero aprender,y que no sabía ni siquiera como buscar.
Disculpe el atrevimiento,pero tenía (quería) decírselo.
Un saludo
María
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