Adiós al verano (del Amor) 1967

"If you're going to San Francisco,

be sure to wear some flowers in your hair...

If you're going to San Francisco,

Summertime will be a love-in there"

...

Cuarenta años ya desde que bajo el lema Paz y Amor, adobado con LSD y cannabis, miles de jóvenes acomodados clamaran por cambiar el sistema. Era el punto álgido del movimiento hippie, mal llamado contracultura, hijos culturales de los beatniks de movimiento continuo de On the road de Kerouak. En una suave mezcla de ingenuidad y rebeldía, reinventaron la vieja bohemia y reclamaron, con cierto pasotismo, la cara presentable del ser humano: el amor, la solidaridad, el compromiso, la libertad, la creatividad, el arte, convirtiéndola en una filosofía.

Pronto pereció deglutido por la cultura dominante, la edad y el afán acomodaticio, pero algunos de sus efectos aún perviven: la liberación sexual, el antimilitarismo, el vínculo social, la ecología…

Quizás la argamasa cohesionadora de ese movimiento fue la música popular que generó, brillante y creativa, mestiza e imaginativa, fruto del viaje lisérgico y de la libertad mental. Mientras The Beatles daban un giro creativo de su pop blandito hacia la experimentación sonora, Hendrix se fundía en una sola carne con su guitarra y Janis Joplin se autodestruía en escena, una banda local pasaba a ser el estandarte de la psicodelia: JEFFERSON AIRPLANE y su disco bandera Surrealistic Pillow (febrero 1967)

...

Queden aquí dos muestras de ellos y su época, con la bellísima Grace Slick al frente, interpretando dos canciones-himnos ya míticos.

White rabbit

Somebody to love