domingo, 8 de noviembre de 2015

Armida, la de Haydn

GB Tiepolo -Rinaldo e Armida in giardino-  (1752)

La ópera no se encuentra entre la mejor y más amplia producción de FJ Haydn, pero aún así, dejó no menos de catorce títulos durante su vinculación con Eszterháza. La última fue Armida, un drama heroico sobre el afamado poema de Torquato Tasso Gerusalemme Liberata, en el cual basaron también sus óperas JB Lully (Armide), Händel (Rinaldo), Vivaldi (Armida al campo d'Egitto), Jommelli (Armida abbandonata), Salieri (Armida), CW Gluck (Armida), Rossini (Armida), Dvorak (Armida), y algún otro.

La obra de Haydn fue estrenada en 1784, gozando durante los primeros años de numerosas representaciones, para caer, con los siglos, en notable ausencia de los escenarios, como todas las óperas del maestro de la Sinfonía y del Cuarteto.

Se trata de un ópera seria, en tres actos, sin apenas números de conjunto, en la que destacan los dos protagonistas: Armida, la hechicera y Rinaldo, el caballero cristiano. Con grandes influencias de la reforma de Gluck, tanto en la obertura y como en el diseño de los números, se perfilan más los sentimientos de los personajes que la acción en sí misma. 

Posiblemente sea el Acto Tercero el más hermoso en cualidades musicales, destacando la rebelión de Rinaldo y el dolor de Armida. Muy recomendable también el limitado pero jugoso papel secundario de Zelmira. Escuchemos su Aria “Torna pure al caro bene”, seguida de la de Armida “Ah, non ferir: t'arresta!”


(vídeo #NikolausHarnoncourt)


(vídeo marius76100)

2 comentarios:

Unknown dijo...

Me es difícil describir la música así como lo que puede hacerme sentir. Sin embargo quiero confesar dos coses: nunca hubiera identificado a Haydn por la melodia. Bartoli, que suele desagradarme por estridente, aquí guiada por Herr Harnoncourt estàespléndida. ¿O era Petitbon y las he confundido?. Como puedes ver no me avergüenza mi desconocimiento.
Un petó.

Barbebleue dijo...

No hay vergüenza alguna: el desconocimiento es la madre de toda sabiduría. Para mí no hay mayor placer que ir día a día reparando mi ignorancia.

Con Haydn tengo un truco: si me gusta, me suena a Mozart, pero sé que no es Mozart, entonces es FJ Haydn... ¡la ignorancia es atrevida!

Bartoli es la del segundo vídeo "Ah, non ferir: t'arresta!", y sí, está muy contenida. ¡la reforma de Gluck?

Otro petó, Glòria