A partir de un libreto traído de Londres, el barón Van Swieten conformó en alemán la parte literaria del Oratorio DIE SCHÖPFUNG (La Creación) de FJ HAYDN; una cumbre expresiva, no sólo del compositor sino del clasicismo musical.
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Dos años de trabajo para una obra con intención declarada de perdurar, de convertirse en clásica. Una composición que forja una humanidad a la imagen del dios creador, para devenir laica en su propia proclamación fraternal, léase masónica.
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Subdividida en tres partes narradas por tres arcángeles (Gabriel –soprano- Uriel –tenor- Rafael –bajo-) dedicadas respectivamente a los elementos, el hombre y los animales, y el paraíso terrenal personificado en Adán –bajo- y Eva –soprano-
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Musicalmente descomunal; se trata de un gran fresco sinfónico de una belleza tal que podríamos calificar de genial, y donde el elemento instrumental-orquestal se convierte en un cronista que provoca la evolución del portentoso proceso, sin desmayos, y con un carácter atractivamente épico.
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Primera Parte: Coro final con Solistas “Die Himmel erzählen die Ehre Gottes” cuyo inicio es un himno de progresión ascendente, cargado de emoción, para concluir en una fuga de carácter apoteósico y eterno.
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(vídeo Barbebleuei)
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Segunda Parte: Trío de arcángeles “Zu dir, O Herr, blickt alles auf” con reminiscencias de la Flauta mozartiana (a quien tanto debe), y Coro final “Vollendet ist das grosse Werk” cuyo conclusión es una doble fuga.
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(vídeo Barbebleuei)
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Tercera Parte: el grandioso Dúo de alabanza de Adán y Eva “Von deiner Güt’ Herr und Gott” también con portentoso Coro final. Tal vez la página más célebre y más lograda de la partitura, paradigma del Clasicismo Vienés.
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(vídeo Barbebleuei)
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Lucia Popp, soprano
Anthony Rolfe Johnson, tenor
Benjamin Luxon, barítono
London Philharmonic Orquesta y Coro
Klaus Tennstedt
Imágenes: Viveros de Estrellas
1. Pilares de la Creación
2. Montañas de la Creación
3. Nebulosa Roseta
6 comentarios:
Espero no olvidar nunca, nunca el duo de Adán y Eva.
Gracias barbe. Una obra para la eternidad.
Cuando volvamos al Universo de donde vinimos ¿sabremos re-conocer a quienes amamos tanto? O estas profundas emociones son sólo privilegio de este mundo en el que soñamos vivir.
Si así fuera, después del inmenso abrazo de esta música eterna de Haydn, viajemos hacia dentro de nosotros mismos donde, gracias al amor del que seamos capaces de dar, nos aguarda toda la plenitud y la dicha, lugar silencioso donde seremos uno con Dios, sabiéndonos criaturas de esta Creación, con sabor a Madre, hacia la que vamos.
Gracias Barbebleue, magnífico este regalo de hoy.
...ossia la memoria como proceso cognitivo que altera nuestro comportamiento, Glòria.
Josefina, en ocasiones pienso que la plenitud consiste en superar la propia individualidad; la Música es una buena aliada.
abrumador...
... de eso se trata, pilar
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