jueves, 9 de diciembre de 2010

Inusual Concierto

Inusual resulta recibir en una pequeña ciudad, alejada de cualquier circuito o festival, a un artista de primera fila en plena expansión, como es el joven pianista británico Paul Lewis.
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Inusual es acoger, aún sin algunos de sus primeros atriles, a la Sinfónica de Galicia haciendo honor a su apellido.
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Inusual es que dicha orquesta haya venido acompañada de su director titular: Victor Pablo Pérez, en traje de faena.
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Inusual se ha convertido encontrar en un programa tres Conciertos para Piano y Orquesta de Ludwig van Beethoven: Segundo, Tercero y Cuarto.
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Inusual el gratis total, previa reserva de invitación, que se convirtió en un puertas abiertas en el Auditorio municipal.
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Usual la asistencia: medio aforo (siendo generosos)
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Paul Lewis es un pianista muy personal, cuya carrera en ascenso se fundamenta en Beethoven (y en Schubert). Su integral de Sonatas recorrió medio mundo, y acaba de publicar sus cinco Conciertos para piano con la Orquesta Sinfónica de la BBC bajo la dirección de J. Belohlavek.
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Dueño de un sonido delicado, sus lecturas se decantan hacia el lirismo, la introspección, la poesía transparente, dejando señas de un virtuosismo amable, delicado, humano, veraz. Su aproximación estilística a Beethoven deriva claramente hacia el eje de la dulzura en detrimento del otro eje cartesiano de la música del genio de Bonn: la violencia. Tal vez ese sesgo deviene su personal aportación…
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La orquesta, pese a la ausencia de su primer concertino, mantuvo la belleza de su sonido, basada esta vez en el empaste de sus cuerdas, si bien adoptando un discreto plano secundario siempre dialogante y arropador. VPP, contenido y dúctil, no digo más…
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Primera parte:
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Concierto para piano n.2 en si bemol mayor op19: interpretación relajada, a modo de introducción, para una obra menor del catálogo de un Beethoven de pequeña orquesta, en la cual destaca el fluido y elocuente Adagio.
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Concierto para piano n.4 en sol mayor op58: obra de alturas sinfónicas pertenecientes al gran Beethoven, cuyo monumental primer movimiento -Allegro moderato- resultó un prodigio de dinámica, elegancia y refinamiento.
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Segunda parte:
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Concierto para piano n.3 en do menor op37: bellísima lectura, siempre recogida, pura y delicada de esta partitura de aromas mozartianos, en cuyo Largo, fervoroso, casi un nocturno, se hizo carne (sonido) la magia de su mecánica digital.
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De los Proms de este mismo año: Paul Lewis interpreta dicho segundo movimiento, o cómo convertir el piano en arpa: (vídeo de JCThompsonMA)
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Inusual Belleza… casi una caricia.

4 comentarios:

GLÒRIA dijo...

Este señor tocó Beethoven en Barcelona. Lo vi en el Auditori y me pareció muy bueno aunque algo sabía de su fama: Lo llaman el nuevo Alfred Brendel. Nunca suelo hacer demasiado caso de los epítetos.
¡Saludos, Barbe!

Barbebleue dijo...

De hecho fue alumno de Brendel, y posee ese toque poético en su tacto.
¡Saludos, Glòria!

Esdedesear dijo...

¡Qué maravilla! Cuánto siento no haberme enterado. Un abrazo.

Barbebleue dijo...

Pues se han paseado por toda Galicia.
Abrazos.