domingo, 8 de febrero de 2015

Una cierta forma de silencio


Y si la Música
ayudase a olvidar?
mi querida memoria
se ha perdido entre
los adoquines de una vieja ciudad,
donde los niños se entendían
en el rodar de un balón.
Ahora ya no recuerdo
cuándo pisé el mar
por vez primera.

Y si las Sombras
fuesen el Mundo?
Lejos de la luz
soy una sombra, quieta,
que nadie ve
ni entiende;
en el reino del Amor,
soy el Olvido.

Desde la vejez
a la infancia,
nos movemos
entre la Necesidad y
el Orgullo
Por qué el mármol es más bello
al quebrarse?

Dicen que lo peor de la muerte
es el Silencio…

Los últimos años de la vida de J. Brahms conocieron un regreso a la obra pianística, al recogimiento del piano solo. Así fueron surgiendo en un plazo de un par de años: Siete Fanstasías para piano op.116, Tres Intemezzi para piano op. 117, Seis Piezas para piano op. 118 Cuatro Piezas para piano op.119.

Partituras alejadas del virtuosismo, muestran un alto grado de introspección y pureza de sentimientos; una luz esencialista. Varias colecciones fueron dedicadas a Clara Schumann, quien comentaría: “en estas piezas, por fin siento de nuevo agitarse la vida musical en mi alma”

Brahms tan solo escribió posteriormente  sus  Sonatas para clarinete y piano, los Cuatro Cantos Serios y los Once Preludios de Coral para órgano. Luego, el Silencio…

Escuchemos  la  exquisita lectura que hace  Radu Lupu  del  Intermezzo número 2   -Andante teneramente- perteneciente a las  Seis Piezas para piano op. 118:


(vídeo Beckmesser2)


fotografía "Laelia anceps" y poema "Silencio de Brahms": Barbebleue

6 comentarios:

Unknown dijo...

Brahms, siempre recuerdo su canción de cuna -lo primero que le escuché- y su arcangélica belleza cuando solo era un músico joven que, por fortuna, encontró a Schumann, belleza que descub4rí no hace tanto tiempo curioseando por la red.
Ahora le recordaré también por la interpretación de Radu Lupu y tu hermoso poema.
Siempre supe que eras poeta. Y que así siga.

Barbebleue dijo...

Siendo joven (porque también yo lo he sido) lo primero que escuché de Brahms fue una obra de cámara: su inconmensurable Quinteto para clarinete, obra tardía (ten en cuenta que es mayor que yo). Ya nunca más pude vivir sin Él...

Respecto a lo último que comentas, como diría el innombrable: "estamos trabajando en ello", aprendiendo de Todos, también de Ti.

pfp dijo...

tan escueta, tan depurada, tan precisa, tan bella! ...después sólo cabe el silencio...

Barbebleue dijo...

silencio con minúsculas...

Mara dijo...

Sí. A mí también me parece un poema bellísimo.
Gracias, Barbe.

Barbebleue dijo...

A mí también me lo parece.
Beso, Mara.