sábado, 22 de septiembre de 2012

Boris 1872




¡Oh, crueles remordimientos,
Terrible es vuestro castigo!

El musicólogo Robert Layton definió sucinta y acertadamente la ópera maestra Boris Godunov como la esencia de Mussorgsky, la esencia de la ópera rusa.

De complicada génesis, este fresco de un hombre y un pueblo retrata con belleza sin par un alma individual y un alma colectiva. En la desintegración en escena del zar Boris se aúnan magistralmente la potencia lírica y la verdad dramática, sobre un marco en el que planean el dios de las masas, manipuladas y manipulables, y la propia conciencia atribulada que tiende a la demencia.

En una adaptación libre de una obra de Pushkin, Modest Mussorgsky presentó la primera versión, más austera, de la obra en 1869 siendo rechazada su representación, entre otras razones por la falta de elemento femenino. Hecho que dio lugar a un profunda revisión de la partitura y del libreto, para felizmente generar la versión de 1872, con el maravilloso Acto Polaco con su despliegue de fantasía y dos nuevos y potentes personajes –la ambiciosa princesa Marina y el fanático jesuita Rangoni-, y la escena final del Acto IV conocida como Escena de la Revolución. Curiosamente no conocería el éxito hasta la orquestación de Rimsky-Korsakov, la cual ya entrado el siglo XX iría perdiendo el favor de crítica y público volviendo hacia la versión original de Mussorgsky.

Por encima de opulentas situaciones de fasto y color destacan momentos claves que configuran la trama profunda de la obra, donde la acción avanza y la caracterización psicológica cobra fuerza:

Acto I: soliloquio del monje Pimen en su celda del Monasterio de Chedov, tras la gran Escena de la Coronación. Inicio de la deslegitimación del zar, desde fuera:

(vídeo Leuenzhan)

Acto II: duo de Boris y Schuisky sobre el zarevich asesinado. Inicio de su propia desintegración, desde dentro:


(vídeo Barbebleuei)
Vladimir Vaneev- Boris
Konstantin Pluzhnikov. Schuisky
Valery Gergiev y la Kirov Opera & Orchestra

Acto III: la conjura polaca del falso Dmitri, Marina y Rangoni. Inicio de la sublevación, desde fuera:

(vídeo Matavitatau1630)

Acto IV: despedida y muerte de Boris. Inicio de la Revolución, final de Boris, desde dentro:

(vídeo sweltame)

2 comentarios:

pfp dijo...

desde la literatura de Pushkin hasta la música de Mussorgsky, pasando por todos y cada uno de los protagonistas de esta ópera que es una Catedral,... ¡¡¡el alma rusa¡¡¡

par de besos barbazul

Barbebleue dijo...

un alma monumentalmente humana!

otro par, pfp