sábado, 19 de noviembre de 2011

Invierno en Mallorca (1838)

Fryderyk Chopin, quebrantado por la enfermedad, reconfortado por el amor de Aurore Dudevant, abrigado por su querido piano Pleyel, terminó, durante su retiro invernal en Valldemossa, sus Veinticuatro Preludios opus 28

Chopin ES el piano.

Un piano de estirpe clasicista, hijo de Mozart, de Haydn, nieto de JSBach.

Un piano que vive en el cantabile, que bebe de la voz humana, su registro, su delicadeza, su altura.

Un piano recogido, intimista, de salón más que de teatro.

Un piano de polifonía cercana, de pureza humana, envolvente y redondo como un abrazo de amor necesario.

Un piano de ritmo implacable, de izquierdas.

Un piano de exquisito legato de una sola mano, de derechas...

Escuchemos la gracia aérea, la infinita introversión de la calidez de los sentimientos más humanos, tan elevados que no dejan de serlo.

Cuatro perlas del opus 28: cuatro Preludios a sí mismos.

Preludio n. 4 en mi menor. Claudio Arrau

(vídeo capetond)

Preludio 17 en La bemol mayor. Arthur Rubinstein

(vídeo ArRubMusic)

Preludio 19 en Mi bemol mayor. Maurizio Pollini

(vídeo ArioniaTellus)
.
Preludio 24 en re menor. Ivo Pogorelich

(vídeo capetond)

8 comentarios:

Anónimo dijo...

Es un placer de fotografía, de texto, de "abrazo".

Gracias, Barbebleue.

Que sea buena jornada mañana.

GLÒRIA dijo...

Eres un poeta, Barbe. Mientras Chopin me abraza daría algo por llorar de amor agradecido la voz que nos legó y que expresa lo que yo siento y no sé traducir a la palabra.
Gracias!

Barbebleue dijo...

Un placer de visita, Anderea. Buena "digestión"

Ni falta que hace la traducción, Glòria, con tal de que nos emocione...

Esdedesear dijo...

¡Qué bien escogidos estos preludios como preludios de qué...?. Conviene serenar el alma, lo consiguen. Si todo fuera cuestión de sensibilidad, estábamos sobrados de propuestas.Muchas gracias, Barbe.

pfp dijo...

un regalo¡

Anónimo dijo...

La música de Chopin llega muy adentro, hasta dar vida al sentimiento que dormía callado en un rincón del alma.
Es una entrañable compañía, en la soledad del camino.
Un beso, Barbebleue.

Josefina dijo...

No, con mis amigos queridos no soy anónima. Soy Josefina.

Barbebleue dijo...

No todo va a ser prima de riesgo, Conchita.

regalo digno de una reina, pilar.

Josefina, con Chopin los sentimientos dormidos sueñan...

Besos a las tres